En la vida real casi nadie piensa que soy agresivo, sino más bien al contrario: muchas personas que conozco piensan que soy demasiado amable y en extremo pasivo. Esto tampoco es lo ideal: Digo, me enojo, pero de verdad cuesta trabajo hacerme enojar. Esto no quiere decir que sea pasivo, ni soso.
Por otro lado, en la red, apenas escribo algo y ya me están diciendo que por qué la agresividad, que si tengo problemas de actitud, que seguro soy un amargado.
Y no, la verdad no.
Esto me tiene intrigado, más que preocupado. ¿Por qué me sucede esto?
Lo he pensado bastante, y sólo se me ocurren tres opciones:
- En la red me sale el lado agresivo, que no debe ser demasiado de cualquier modo; o
- En la vida real soy muy irónico (lo soy) y en texto escrito la ironía es más difícil de detectar; o
- La red entera es un jarrito de tlaquepaque.
7 comentarios:
es curioso como en la red una de nuestras voces suele tomar el control. a mí me pasa lo suyo pero al revés: en la vida real tengo fama de sarcástica, cruel y agresiva. en internet soy un globito de luz. supongo que uno es todas esas cosas, lo que pasa es que por escrito no hay gestos, tonos, miradas y contextos que le pongan matices a las palabras.
Nunca mejor dicho, pequeña padawan.
:)
Saludos.
Sr omegar, meme cumplida, chido, lo invito a usted y a todos a visitar mi blog, acabo de subir mi último podcast.
Chido, Buena vibra, me latieron los posts pasados, preparo mi minificción
Cuídese, un abrazo
Sub
Borré un comentario, pero porque era spam. Y era spam cultural, que es del peor tipo.
La verdad, es que a mí no me pareces en absoluto agresivo, más bien yo diría que eres franco y suele pasar que algunas personas no acostumbradas a este tipo raro (por poco común) de personas, lo toman como agresión. En lo particular, me fascina como escribes :D
Yo creo que es la segunda opción. La ironía hay que remarcarla mucho en este medio... puede parecer otra cosa si no.
Por otra parte estos problemas se solucionarían si nos conocieramos más a fondo... pero como no suele ocurrir debemos calibrar bien lo que decimos y como lo decimos.
Un saludo afectuoso.
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